miércoles, 17 de septiembre de 2014

PAMPLONA

NACEDERO DEL URREDERA

El Nacedero del río Urederra es la surgencia natural de todo el acuífero kárstico de la Sierra de Urbasa. Esta surgencia se encuentra en un cortado que constituye un anfiteatro rocoso de gran belleza, dentro del cual el agua del Urederra va descendiendo en una sucesión de cascadas y pozas de gran belleza.


La ruta parte del pueblo de Baquedano, donde encontraremos un párking con una tarifa diaria de dos euros. Desde allí, el camino atraviesa el pueblo y va descendiendo progresivamente HASTA llegar al nivel del río. A partir de aquí la naturaleza nos ofrece un espectáculo de belleza incomparable: las cascadas, las pozas de color azul turquesa, la luz que se filtra entre las hojas, los diversos tonos de los árboles... Toda esta belleza nos acompañará hasta el final de la ruta: el nacedero del Urederra.





Otros DATOS:

El nacedero TIENE un caudal medio anual de 4000 litros por segundo, aunque puede alcanzar 50000 litros en época de grandes lluvias y reducirse HASTA 300 litros en pleno verano.

La vegetación predominante es el hayedo, aunque la variedad de flora es muy destacable, pudiendo encontrar tilos, robles, serbales, arces, fresnos, olmos, sauces, avellanos, boj y enebros, ENTRE otras especies.

La fauna: es fácil observar buitres, alimoches, halcones, cernícalos, chovas y vencejos. También podemos ver paseriformes, como el mirlo acuático, carboneros, herrerillos y pinzones. En cuanto a mamíferos, podemos ver gato montés, garduña, tejón y jabalí.

Cómo llegar:
Llegaremos por la carretera NA-718 (Estella - Olazagutia), la cual abandonaremos en el kilómetro 13,8 PARA coger la NA-7187 que nos llevará a Baquedano


LEYENDAS

“Pamplonilla la loca”: nombre que le dieron en tiempos de la colonia a Pamplona.

         Pamplona en el sigo XVI tuvo su época de locura, porque se descubrieron las minas de oro de Páramo Rico, de Santurán, San Antonio, La Bajá (NOMBRE de esa época). El que sí es preciso es el de Páramo rico y la mina de pata e’gallo. Esta última inundo de oro a Pamplona. Cantidades de metal precioso  boto esa mina, y se corrió la voz por toda la región. A todo el nuevo reino de Granada se  difundió la noticia del descubrimiento de Pamplona. Entonces, empezó a llenarse la población de alimañas, rateros indeseable en busca del metal dorado y Pamplona se volvió un desorden: garitos, mujeres, prostitución, robos, concupiscencia, el deshonor, todo. PERO la divina providencia es poderosa y el señor quiso castigar esta demencia.
         Ya todo el mundo daba remoquete de “pamplonilla la loca”, por su insania. El señor entonces, empezó a enviar sismos que se presentaban periódicamente, pero esto no acobardo a los pamploneses ni a las alimañas llegadas.
          La historia de los pueblos se hace en buena PARTE con aquellas leyendas, mitos, CUENTOS y anécdotas que el vulgo se encarga de recoger y transmitir de generación en generación.
          Las personas van inventando y recopilando las diversas versiones, y cuando menos lo advierte la comunidad, existe un buen NÚMERO de ellas, las cuales van dando identidad propia a las regiones.
          La cuidad de Pamplona no ha escapado a este fenómeno y hoy, después de 449 años de ser fundada, ENCONTRAMOS PERSONAS como Víctor Manuel Villamizar, popularmente llamado “Toto”, quien ha venido desde hace años recuperando espacios acerca a de las memorias pamplonesas a través de la cuentearía y el manejo del lenguaje popular como narraciones de historias, mitos, leyendas, cuentos y anécdotas que son hoy motivo de admiración por parte del oyente aunque su tradición se ha perdido a medida que pasan los años.

martes, 16 de septiembre de 2014

SANTANDER


SANTANDER

Distancia: 7 kilómetros.
Duración: Una hora y media - dos horas.
Dificultad: Fácil.
Para llegar a Pedreña, punto de INICIO y final del recorrido, se recomienda coger la lancha de las Reginas que sale del embarcadero del paseo de Pereda de Santander y realiza la ruta Santander-Pedreña-Somo. La lancha realiza una agradable paseo por la bahía y tarda unos 20 minutos en realizar el recorrido Santander-Pedreña o viceversa. También se puede ir en coche a Pedreña y aparcar en el embarcadero de esta localidad, punto de partida de la ruta.
Descripción de la ruta:
Nuestra ruta comienza en el embarcadero de Pedreña, lugar donde nació Severiano Ballesteros y donde nos deja la lancha de las Reginas. Si salimos hacia la derecha y nos dirigimos hacia el final del embarcadero, debemos girar a la izquierda por la última calle que nos encontramos, para a unos 100 metros de este lugar aproximadamente introducirnos en una playa, en donde a mano izquierda encontramos una pasarela de madera que corresponde al primer tramo del sendero. Tras terminar esta pasarela CONTINUAMOS nuestro trayecto por una senda adoquinada que termina sacándonos de la costa por una antigua ermita que se encuentra en estado de ruina.
El siguiente tramo discurre por carretera, por lo que conviene tomar precauciones con los coches. En la ermita seguimos de frente y a unos 500 metros se encuentra un mojón en el suelo que nos indica la dirección al sendero. ÉSTE se encuentra muy cerca de nosotros aunque un poco escondido, ya que deberemos tomar una calle arbolada a la derecha que no tiene ninguna indicación y que nos lleva hasta la depuradora de Pedreña, al poco de pasar una pequeña vaquería que dejamos a nuestra derecha.

 Playa del embarcadero de Pedreña
En el siguiente tramo, de NUEVO en una senda peatonal o ciclista y de un kilómetro y medio de longitud aproximadamente, nos dirigimos hacia el campo municipal de golf de la Junquera, el cual bordeamos siguiendo el camino marcado, que no tiene pérdida.
Una vez bordeado el campo de golf, comenzamos a realizar la subida de un acantilado, siendo éste el tramo con las vistas más espectaculares del paseo, pues al hacer cima tenemos a nuestra izquierda Peña Cabarga, justo enfrente Astillero, y de izquierda a derecha tenemos vistas sobre el aeropuerto, el puerto de Raos, Santander, la península de la Magdalena, la isla de Mouro, el Puntal y Pedreña, con lo que tenemos una perspectiva completa y privilegiada de la bahía de Santander. Al llegar al oleoducto, daremos la vuelta y volveremos por el mismo camino a Pedreña.

Anocheciendo en la bahía

En total habremos andado aproximadamente unos 7 kilómetros y tendremos bien merecida, antes de irnos para casa, una buena COMIDA o cena en los asadores que se encuentran situados justo al lado del embarcadero de Pedreña.

LEYENDAS

Cuenta la tradición que Emeterio y Celedonio eran oriundos de Calahorra (La Rioja), hijos del centurión y mártir Marcelo) y que militaron en las legiones romanas, pero las abandonaron profesando públicamente la milicia de Cristo, estos hermanos formaron también parte de las legiones romanas Hasta que se decretó la persecución de los cristianos. Decidieron entonces entregarse al procónsul de Calahorra declarando su fe y aunque fueron encarcelados y torturados nunca renunciaron a su religión, por lo que fueron condenados a morir decapitados en las afueras de la ciudad, junto al río Cidacos, afluente del Ebro, sufrieron el martirio y fueron decapitados un 3 de marzo del año 300. Se cuenta que antes de morir, Emeterio lanzó al aire su anillo, y Celedonio su pañuelo, que ascendieron hacia el cielo a la vista de todos. Sigue la tradición diciendo que fueron transportadas en una barca de piedra Para proteger ambas reliquias del avance musulmán. Llegaron a Santander, después de dar la vuelta a la Península, chocaron y atravesaron una roca en la entrada de la bahía (actual Isla de la Horadada) y se Instalaron en la cueva bajo la primitiva iglesia del Cerro de San Pedro (Somorrostro). El monasterio existente en dicho lugar los tomó como patronos, colocando sus efigies en el escudo de la iglesia.Allí quedaron sepultados sus restos. En unas excavaciones realizadas en 1531 se hallaron y se encerraron en los actuales relicarios y se expusieron al culto en el templo donde ahora reposan.


Una vez más encontramos en el corazón mismo de la gran ciudad una muestra del misterio que nos rodea, de esa historia que nos está esperando, ese retazo de leyenda que hay que recuperar para no olvidar que toda historia se fundó en una leyenda, en un misterio, en una tradición.... que ha llegado hasta estos días de materialismo y hedonismo. Recuerda lector, que la próxima vez que escuches la palabra “Santander” proviene de una historia, leyenda, tradición...de un Santo cuya cabeza reposa desde hace siglos a pocos metros de donde quizá pasas todos los días...saludos
Dis

lunes, 15 de septiembre de 2014

CUENCA

PR CU-5: Sendero del nacimiento del Río Guadiela

Descripción ruta                    
 Esta ruta nos lleva de Masegosa a Cueva del Hierro o viceversa. Todo el recorrido se realiza por pistas en buen estado por lo que se puede realizar en bicicleta. Para realizar el recorrido desde Cueva del Hierro deberemos buscar una pista forestal que se encuentra frente al casco urbano y que sale desde la carretera CM-210. Si partimos de Masegosa deberemos situarnos en el pueblo y buscar el camino que nos lleva por las antiguas eras en dirección norte. A continuación se describe el recorrido desde este punto hasta Cueva del Hierro.

Tomando el camino de las eras, tras 935 m, se llega a la carretera CM-2201. Al llegar a la carretera caminaremos hacia la derecha 450 m por arcén.

Tras esto tomaremos una pista forestal que sale a la izquierda. Caminamos por esta pista que transcurre bajo un pinar. En un cruce de caminos se encuentra la Cueva de los  Mosquitos. Es una pequeña sima, escondida a la derecha del camino. En este cruce se debe tomar el camino que sale a la derecha. El pinar cada vez se vuelve más majestuoso y encontramos grandes ejemplares de pino albar.



Una vez se sale del pinar hay un cruce de caminos. Si tomamos el 1º que sale a la derecha iremos a el área recreativa de San Antón (a 800 m). El segundo, a la derecha, lleva al Nacimiento del Guadiela (1,3 km). Allí encontraremos el manantial principal del río y el humedal que alimenta, también, este primer tramo del río. De vuelta, continuando de frente, llegaremos a Cueva del Hierro.

LEYENDAS

En uno de esos barrios de Cuenca que pertenecía a los moros, estaba la vivienda de la mora más bella, ella se había enamorado de un joven de las tropas del ejército cristiano, encargadas de vigilar y asegurar la calma en ambas culturas.
Su amor se debía de mantener en secreto y cualquier contacto entre las dos culturas estaba vetado, esta situación provoco que se vieran a escondidas por una pequeña ventana de la residencia de la mora.
La situación se complicó cuando el padre de la mora, según las tradiciones típicas había llegado el momento de casar a su hija con el joven que había pedido su mano, ante esta situación la guapa mora se negó y rechazo el casamiento.
Sin entender el motivo de tal rechazo vivido, el joven moro no se dio por vencido y empezó a investigar cual podían ser sus razones para negarse a ser su esposa. Al margen de esto, los dos enamorados, el soldado y la joven mora tuvieron la idea de que si se casaban ya nada podría separarlos, para casarse la bella mora tenía que convertirse al cristianismo, por lo que la idea se complicaba más.
La intención de los jóvenes era, escapar sigilosamente la noche siguiente y buscar un cura que les convirtiera en marido y mujer. La torre mangana que en aquella época antigua era el principal reloj de la ciudad les sirvió para sincronizar sus planes, acordando que al sonar el reloj de la torre Mangana, irían a buscar al cura que les uniese como matrimonio cristiano.
Cuando la noche acordada empezó a sonar el reloj de la torre manga, salieron en busca el uno del otro, de nada sirvió, el avispado moro que desde el día de su rechazo vigilaba los pasos de la pareja, reuniendo una muchedumbre de moros, atacaron y mataron al joven soldado enamorado de la mora, por lo cual nunca llegaron a poder reunirse esa noche.
Tuvo que pasar varios meses, hasta que la verdad fue revelada a la bella mora, del porque su amado caballero nunca llego al sitio que habían escogido para reunirse. En ese mismo instante que se enteró de esta noticia, la bella mora intento suicidarse para estar con su amado en los reinos del cielo, cosa que impidió el cura amigo presente en la misma habitación.
También le advirtió que el sacrificio estaba negado para los cristianos y si lo permutaba jamás iría al Cielo a reunirse con su amor.
Cuenta le leyenda que esta mora, después de haberse cambiado al cristianismo, sin poder volver son su familia mora ni tener forma de alcanzar a su amado, se fue al convento que está en la calle San Pedro donde permaneció hasta el fin de su vida…


viernes, 12 de septiembre de 2014

ASTURIAS

FOCES DEL PENDÓN

Acceso:

Salida de Oviedo por la autopista A-66 dirección Santander pasada la población de Siero, abandonamos la autopista (salida 14) para tomar la N-634 dirección Nava, después de pasar el k 177, nos desviaremos a la derecha siguiendo la indicación que pone Fuensanta 2 km.

Descripción de la ruta:

Salida de Fuensanta, desde el aparcamiento existente frente a la planta embotelladora de agua mineral, en lo que antiguamente fue un balneario.
Cruzamos el puente a la izquierda sobre el río Pra, al pasar el mismo nos encontramos, de frente un recinto cerrado por una barrera con un par de tolvas en su interior, a la izquierda dos caminos, uno descendente paralelo al río y otro ascendente; a la derecha, otros dos caminos uno llano paralelo al curso del río que nos llevaría al palacio de Ferrería, y otro que asciende y en el que está marcada la identificación del sendero de pequeño recorrido P. R. AS - 45 - Foces del Pendón -.


Este será nuestro recorrido en el día de hoy; vamos ascendiendo por una pista ancha pero con el piso muy descompuesto, al poco encontramos un cruce con indicadores en las dos direcciones, hacia la derecha Mayau Pastor, y hacia la izquierda, que es nuestra dirección, Los Fornos.

Continuamos ascendiendo bajo la protección solar que nos brinda el bosque de castaños, llegando al cabo de unos minutos a una explanada que sirve de aparcamiento de aperos agrícolas en la zona de Los Fornos, suaviza la pendiente y ganamos un collado con una caseta con abrevadero y fuente, un buen momento para hacer el primer descanso o reagrupamiento mientras rellenamos las cantimploras; continuamos la ruta cruzando la pradera por detrás de la cabaña y giramos a la derecha, contemplamos desde esta posición las Foces del Pendón, con la senda tallada en la caliza de nuestra derecha (izquierda fluvial).


Nos adentramos en las Foces propiamente dichas, y vamos recorriéndolas a la vez que disfrutándolas. En la parte final de este tramo encontramos una nueva fuente, en una zona que en invierno o época de lluvias forma una bonita cascada, continuamos y al poco el desfiladero se adentra en la riega de la derecha, para alcanzar la zona denominada - Les Mecedures - donde tiene lugar la captación de aguas para el pueblo de Nava, y que identificaremos por una caseta, en esta zona confluyen dos riegas, una frente a nosotros conocida por Pendón, y la otra a la derecha conocida como Bomalu; nos adentramos en la de la derecha para pasar enseguida por un rústico puente a la riega de Pendón y realizar unos ascensos por el bosque centenario de fayas y robles, las marcas nos permitirán seguir el sendero sin dificultad, giramos a la derecha por encima de una faya que nos habrá llamado la atención, por su diámetro y los "retorcijones" que presentan sus ramas; descenderemos unos metros a pasar la riega de Bomalu, por el puente de Pendón, aunque unos metros antes dejamos a la izquierda una pista que va al collado Fuentes y braña de Brañabernez.


Después de cruzar el puente entramos en un antiguo camino en mal estado, por donde los vecinos de esta zona transportaban la hierba hacia sus brañas; afrontamos la ascensión que a paso corto vamos superando sin apenas esfuerzo, gracias a lo cómodo y tendido del trazado; en la primera mitad, más pedregosa, pasamos por delante de una cabaña en ruinas, continuamos acercándonos a la pared caliza que parece cerrarnos el paso, para entrar en la segunda parte de la ascensión, esta más herbosa; durante los descansos que iremos realizando en este tramo de ascensión, podemos contemplar a nuestra espalda el pico Múa.

Ganamos el Collau de la Canal, desde donde la visual se abre por completo hacia el norte y contemplamos toda la zona de Nava y los municipios circundantes, si bien a nuestros pies se encuentra una zona salpicada de cabañas - Mayau Pastor - por donde discurre el sendero.

Desde esta posición podemos hacer el Pico Varallonga de 865 metros que nos llevará entre subida y bajada, poco más de hora y cuarto. Como la ruta de hoy es corta, merece la pena.


Nuevamente desde el pico, deberemos de ganar el Mayau Pastor, desde donde continuamos el sendero P.R. AS-45, por cómoda pista siguiendo el indicador que nos señala hacia Tableu, pasamos al poco tiempo por la proximidad de un abrevadero, que dejamos a nuestra izquierda - fuente El Faceu - "distrito forestal monte Nº 155, año 1.968", nos refrescaremos y continuaremos por la pista contemplando a la altura de nuestra visual los pueblos del concejo naveto, destacando su capital Nava; pronto pasaremos por Los Xerrapos y ganamos el llano de Tableu, aquí la pista asciende unos metros y podemos contemplar a nuestra derecha y muy por debajo de nuestra posición, la caseta con abrevadero de Los Fornos, por donde se da entrada a Las Foces del Pendón, y donde por la mañana habíamos llenado las cantimploras; continuamos la pista y poco antes de llegara las cabañas de Vallorita, donde la pista describe unas revueltas, atajamos por la izquierda, para salir nuevamente a la pista a la altura del indicador - Vallorita -. Continuamos el recorrido por la pista y llegamos al cruce por donde en la mañana habíamos tomado la dirección de Los Fornos, solo nos faltara concluir la ruta en la población de Fuensanta, donde llegaremos en unos tres minutos y donde daremos por finalizada la ruta del día de hoy con un tiempo aproximado de unas 4 horas y media.

LEYENDAS

La leyenda de la Virgen de la Barca:

Era una tarde en Navia, ya desde la mañana el día apareció azul con gran claridad.
Los pescadores se encontraban de muy buen humor porque había sido un gran día de pesca para los que volvían y prometía serlo para los que empezaban la jornada.
La flota que ahora salía, estaba compuesta de diez barcas de seis remos, y cuando el sol ya se iba ocultando, se echaron a la mar. Sin necesidad de alejarse mucho de la costa, puesto que todavía no había subido la marea, lanzaron las redes, con la sorpresa de una gran captura cada vez que las lanzaban.
Tan impresionados estaban, que no se dieron cuenta que se estaba formando una gran tormenta, justo encima de ellos. Cuando los relámpagos empezaron a deslumbrar, los pescadores salieron de su letargo, y planearon volver al puerto.
No pudieron hacer gran cosa, ya que cada vez, la tormenta era más grande, las olas inmensas y ellos apenas podían avanzar. Cuando casi llegaban a puerto, las olas les hacían retroceder y así se tiraron casi toda la noche. La situación cada vez era más insostenible, cuando a uno de ellos se le ocurrió rezar a la Virgen y todos le siguieron esperando un milagro.
Ya resignados estaban, cuando de pronto una de las barcas que estaba en peores condiciones, sintió un golpe como si se hubiera encallado en una roca, pero en lugar de resquebrajarse la barca, se inició una gran calma y con la luz de los relámpagos vieron que la última ola los había dejado en una roca, que la barca no tenía nada roto y que a un lado de ella estaba la imagen de una Virgen con el niño en brazos. La amarraron y con mayor fe que nunca se pusieron a rezarla y a darle las gracias.

A partir de ahí, el mar entró en calma, y llegaron a puerto casi al amanecer el día 15 de agosto, todo el pueblo estaba en espera de noticias y cuando los vieron llegar ellos contaron el suceso y comprendieron que la Virgen había obrado el milagro. Allí mismo, en aquella roca que desde este suceso se llama Peña de Nuestra Señora, fue proclamada Virgen de los naviegos. Se le hizo una iglesia en el pueblo y el pueblo la honraría con el nombre de Nuestra Señora de la Barca.

jueves, 11 de septiembre de 2014

A CORUÑA

COSTA DA ÉGOA

Variante circular de la PR - G 101, esta ruta que originalmente salé de Carral y que en su parte final tiene forma de piruleta. Lo que os mando aquí es la piruleta, sin el palo. Apta para hacer en familia y que no es dejará indiferentes dada su belleza y su cercanía a A Coruña.

La iniciamos en el Eco-Museo con sus 14 molinos en linea, dejando el coche delante de la casa de turismo rural que lleva el mismo nombre COSTA DA EGOA y donde se come realmente bien a base de platos caseros. Tenéis más información en www.costadaegoa.com, existen paneles informativos a lo largo de toda la ruta, la señalización en algunos puntos ha desaparecido y algún tramo pequeño necesita un pequeño desbroce.

 En esta ruta hice todas las variantes posibles que son 3: la iglesia de San Pedro de Rubieiro y su zona recreativa, el mirador de Rubieiro, con vistas a todo el valle de Barcia y la bajada al batán en la subida hacia Herves, hoy en día reconvertido en molino y donde hay una cascada de unos 100 m de desnivel, lamentablemente la maleza y lo poco cuidado de la zona, nos dejan apreciar dicho salto, tenéis un panel explicativo del batán al lado de la casa de su propietario, Manolo, persona amable y que en solitario y sin ayuda no puede luchar contra la Naturaleza.




LEYENDAS


En la noche fría dejan sus moradas
viniendo a este mundo a expiar sus culpas
mas después de las nueve, y en lontananza
multitud de luces caminan sin rumbo.

Sigo la procesión con un hacha de cera
soy una parte de ellos que aterrorizan la aldea
entablo amistad con fantasmas y visiones
bañando en terror a los pobres de espíritu.

¡A Santa Compaña!

Cierra esa ventana y atranca esa puerta
encomiéndate al santo. ¡A Santa Compaña!
son las almas en pena que salen de la iglesia
con la cruz y el scano vagan por los contornos.

Por la cerradura sacan a los dormidos
para que se unan a ellos y a su tan lúgubre marcha
más pobre de aquel que no pase por muerto
porque le entregan un cirio y ese no vuelve a su lecho..

Sigo la procesión…
¡A Santa Compaña!
Sigo la procesión…
¡A Santa Compaña!






miércoles, 10 de septiembre de 2014

PONTEVEDRA

RUTA DEL RIO ELFONSO

Este sendero discurre siguiendo el río Eifonso desde Mourelle hasta el poblado primitivo de la Fraga (Bene Vivere).
Durante el recorrido podremos observar varios molinos y una cascada, la cascada de la Bouza Fría. También pasaremos cerca de la Ermita de San Cibrán.
El recorrido termina en el parque forestal de Beade, donde podemos disfrutar de zonas de recreo muy bien equipadas, y un mirador con excelentes vistas a la ría de Vigo.



RUTA

En la parroquia de Bembrive tenemos el inicio de un sendero perfectamente acondicionado y de una belleza y tranquilidad que impresiona, recorriendo el cauce del rio Eifonso.
El acceso inicial se encuentra en una pequeña rampa sujeta por un muro de piedra justo al borde de la carretera.
Los primeros 700 metros son prácticamente planos, y en ellos encontraremos los dos primeros molinos, perfectamente restaurados, cuidados y señalizados: “Muiño do Sorrego” y “Muiño da Pedrosa”



Justo al sobrepasar este segundo molino nos encontraremos con un repecho considerable, de apenas unos 80 metros, y que en la parte superior dispone de una escalera de madera. Como premio a la ascensión, en lo alto tendremos un manantial de agua potable.



A partir de aqui el sendero continúa en plano e incluso en una pequeña bajadita y nos conduce hasta otro molino (“Muiño de Buraco”) y a su lado la cascada conocida como “Bouzafría”, de algo más de dos metros y medio de altura, aunque el mini cañón en el que se encuentran tiene bastante más desnivel. Dependiendo de la época del año y del caudal del rio, su espectacularidad varía.



El sendero continúa todavía unos 3 kilómetros más montaña arriba, con una considerable pendiente, pasando por la capilla de San Cibrán, por debajo de la autopista Vigo-Baiona (AG-57), más molinos, los restos de un poblado medieval abandonado y del que no se disponen datos… En lo alto, disfrutaremos de unas vistas maravillosas de Vigo y su costa.






LEYENDAS


El navío “Cessnock” de bandera portuguesa tiene la mala suerte de “ponerse a tiro” de “La burla negra”, y ya os imaginaréis lo que ocurrió, tripulación y barcos “borrados de la mar oceana“.

El siguiente barco en caer en “las garras” del gallego y cuya tripulación sufrío su crueldad fue el New Prospect, también inglés.

Habiendo enfadado a brasileños, ingleses, norteamericanos y portugueses decide que un puerto “casi” seguro sería el de La Coruña, llevaba las bodegas a “reventar“, ni siquiera una mosca podía entrar en ella, y como habían tres marineros que “le daban mala espina” y no se fiaba muchos de ellos, pues por el camino desaparecieron para siempre.

Cuando llega al puerto gallego, consigue engañar a las autoridades, haciendo que un miembro de la tripulación se hiciera pasar por el autentico capitán de “El defensor de Pedro”, tened en cuenta que él era muy joven.

Benito era gallego, más concretamente de Pontevedra, y ya que estaba por esas tierras fue a ver a sus familiares, y según cuentan algunos, escondió una cuantiosa cantidad de dinero en esa localidad, para cuando volviera.

Con un suculento y cuantioso capital a cuenta de toda la mercancía robada de otros barcos, “pone las anclas a secar” y “embiste ebrio de alegría” hacia el sur, en donde piensa “jubilarse“, exactamente en Cadiz.

Cercano a su punto de destino, el vigía, que sería novato o el torpe de la tripulación, confunde el faro de La Isla de León con el de Tarifa, por lo que “La burla negra” se mete de lleno contra la costa, y aquí es donde se arma la “de Dios es Cristo“.

Al parecer, según cuentan, el inglés que se libró de la “escabechina” del “Morning Star” andaba por aquellos “andurriales“, ¡también es mala suerte para el Benito y su tripulación! y los delata, como resultado 10 de sus hombres son ahorcados allí mismo, y el Benito “saliendo por patas” no se le ocurre otra cosa al “alma de cántaro” que dirigirse hacia Gibraltar.


En Gibraltar por aquel entonces no estaba el “soplagaitas” del Picardo, pero habría otro de su misma “calaña“, ordena detenerlo, lo acusa de 75 asesinatos y lo manda a la horca, acabando aquí las fechoría de Benito de Soto Alboal, el pirata gallego

viernes, 5 de septiembre de 2014

ORENSE


El Cañon del Sil

El Cañón del Sil es sin duda uno de los parajes de la geografía Gallega más interesabntes para visitar. El impresionante contraste de las rocas y vegetación hacen de su recorrido un inmejorable placer para el visitante, un paseo en catamarán por el río nos, hará disfrutar al máximo de su belleza. Bien desde el cauce del río, bien desde los miradores que podemos encontrar en lo alto de las montañas nos ciega la belleza de este paraje natural, un microclima especial hace que podamos contemplar vegetación incluso mediterránea como pueden ser los olivos. La riqueza monacal del cañón del Sil transforma el viaje en una experiencia cultural e histórica inigualable, el Monasterio de Santa Cristina es un ejemplo del que fue esta zona en tiempos pasados, uno de los rincónes que no pueden faltar en la visita al cañón. Este comprende la ribera de los ayuntamientos orensanos de Nogueira de Ramuín y Parada de Sil y en los lucenses de Pantón y Sober. Los límites del cañón del Miño y, sobre todo, de la Ribera Sacra son mucho más amplios.

Está documentado el nombre de Rivoyra Sacrata para referirse al refugio de monjes y eremitas desde tiempos de los suevos en las gargantas fluviales del Sil y del Miño. Hasta una docena de monasterios, la mayoría pasados a la regla benedictina y luego exclaustrados, asentados en parajes que invitan a la reflexión.


Aquí los límites de la tierra son tan imprecisos como los del cielo. Nadie sabe dónde empieza y dónde acaba la Ribeira Sacra.

El río formó a lo largo del tiempo profundos cañones, que en los más abruptos desfiladeros del Sil llegan a los 500 metros de profundidad. Son fracturas graníticas entremezcladas de bosques autóctonos por todos los rincones. A pesar del fuerte desnivel medio, el paisaje está humanizado en bosques y cultivos de viñas por medio de balcones (terrazas de bancales) en las laderas de solana. Es de admirar la difícil vendimia en las pendientes donde la espalda de cada uno sigue siendo el único sistema, excepto pequeñas ayudas modernas de mecanización por medio de raíles. Son reputados desde tiempos romanos los vinos de Amandi y la variedad de uva autóctona, mencía.


En Parada de Sil, una pista de tierra lleva hasta el más renombrado mirador: "Los Balcones de Madrid", colgados sobre el abismo, con el santuario de Cadeiras en la otra orilla y la llanura de Monforte como horizonte. Una buena alternativa desde la carretera C-536 (Ourense-A Pobra de Trives) es aprovechar el castillo de Castro Caldelas como mirador y después perderse por la bajada hacia A Teixeira dejando a un lado los bosques mixtos del río Edo y, curva a curva, salir a Parada de Sil





LEYENDAS

LAS BURGAS

En Rivadavia había un ermitaño que se llamaba Pedro y que estaba en el secreto de llevar los canales de aguas calientes al pueblo.

Una vez se sintió enfermo y pensó: "Ya soy viejo y algún día ha de acabar mi vida".

Se sentó a la puerta de la ermita cuando pasó por allí un pastor que al verle tan alicaído le preguntó si necesitaba algo.

"Me encuentro mal, pero Dios dispondrá".

El pastor dijo "Iré a dejar las ovejas y vendré con el médico".

Así hizo y a partir de ese momento, todos los días el pastor pasaba por la ermita a ver que tal se encontraba Pedro.


En el pueblo había una moza que estaba enamorada del pastor, pero éste no le hacía caso.


Un día ocultó en las alforjas el cáliz de la iglesia y le acusó del robo.

Los aldeanos, al oirlo, persiguieron al pastor y le dieron muerte.

Pedro, al enterarse de la muerte de su amigo desvió los canales de las aguas calientes de Rivadavia a Orense donde afloraron en las Burgas.






jueves, 4 de septiembre de 2014

PALENCIA


Rutas de montaña y senderismo en Parque Natural de Fuentes Carrionas y Fuente Cobre

En el confín más remoto e inaccesible de la provincia de Palencia se levanta una espectacular, y casi desconocida, cadena montañosa. Sus picos y crestas, modelados en las duras y apretadas calizas de montaña, sobrepasan los 2.500 metros de altura y conforman un singular relieve a base de fantásticas agujas, impresionantes precipicios, altivos cantiles y profundos valles. También abundan en la zona los lagos de origen glaciar.

Dos importantes ríos tienen sus fuentes en estas montañas el Carrión y el Pistierga. El primero de ellos nace en el corazón más escarpado de la montaña y sus fuentes -la laguna de Fuentes Carrionas que da nombre a toda la comarca- están tan aisladas que incluso es posible descubrir en ellas las huellas de varias parejas de oso pardo. El Pisuerga brota en una zona -Fuente del Cobre- de más suavidad paisajística y en donde lo que predomina son los bosques caducifolios de haya y roble.

En la zona del norte de Palencia se concentra además uno de los mayores y más notables conjuntos de arte románico de todo el mundo.

Fuente Carrionas.
En la ruta por Fuentes Carrionas te encontrarás con los más altos picos de la Montaña Palentina: el Curavacas(con 2.525m.), el Espigüete (con 2.450 m.) y Las Lomas(con 2.451 m.). El nombre a esta zona se lo da el Río Carrión, que nace en la Laguna de Fuentes Carrionas. A la abundante agua de este río se suma la acumulada en los embalses de Camporredondoy Compuerto. La riqueza en bosques de roble y haya, las zonas de excelentes pastos, la cantidad y calidad de la pesca y caza están aseguradas en estos entornos.

A la cabeza de esta zona se encuentra la villa de Guardo, cruzada por el río Carrión. Tomándola como punto de partida podremosvisitar el Valle de San Quirce o el Alto de Torales, dejándonos impresionar por la belleza del paisaje. Visitaremos villas como Mantinos, Villalba de Guardo o Fresno del Río, pudiendo ampliar esta visita a poblaciones como Velilla del Río Carrión u Otero de Guardo, los dos Cardaños, Camporredondo, Alba, La Lastra, Rebanal de las Llantas, Resoba, San Martín de los Herreros, Santibáñez de Resoba, Triollo, Ventanilla, ... villas éstas cargadas de leyendas, arquitectura popular, fiestas y rica gastronomía, contando todas ellas con el marco incomparable del paisaje de montaña.

Vidrieros. Valle de Pineda.
Parte de este territorio ha sido declarado Parque Natural de Fuentes Carrionas y Fuente Cobre - Montaña Palentina, ocupando el ámbito de protección del parque natural municipios como: Velilla del Río Carrión, Aguilar de Campoo, San Cebrián de Mudá, Cervera de Pisuerga, Triollo, Pollentinos, Brañosera, La Pernía, Castejón de la Peña y Dehesa de Montejo.

Fuente Cobre
Para llegar hasta el Valle de Redondo, salimos de Cervera de Pisuerga por la carretera CL-627 en dirección a Potes. Un kilómetro después de pasar el pueblo de San Salvador de Cantamuda, una carretera local nos lleva hasta Santa María de Redondo, punto de inicio de esta excursión.


Al final del pueblo, cruzamos un puente que salva el arroyo Lombatero y seguimos la pista que transcurre paralela a la escombrera de una antigua mina de carbón y que nos lleva a otro puente sobre el río Pisuerga. A partir de aquí el camino asciende dejando el río a la izquierda. Hemos de cruzar un puente más y pronto nos encontraremos con una bifurcación. Junto al cruce hay una señal que limita el acceso de vehículos.


Continuamos por la derecha (la pista que dejamos a la izquierda será por donde efectuemos el regreso), hasta la confluencia de dos valles. El Pisuerga recibe a nuestra derecha las aguas del arroyo de Tejedo. Sin cruzar el río, tras pasar por unas camperas, el camino, ahora apenas un sendero, asciende por el fondo del valle, cerca del río. Este es uno de los tramos más atractivos del itinerario. El sendero transcurre bajo un sotobosque de hayas, robles, acebos, avellanos, abedules y mostajos, a veces por el cauce seco de algún torrente.


Cuando por fin el camino abandone la espesura nos encontraremos de súbito con unas pequeñas cascadas y algo más arriba la Fuente del Cobre, coronada por las crestas de unos farallones calizos.



El regreso se puede efectuar por la misma ruta o por un sendero alternativo, bien marcado por el continuo trasiego de los visitantes, que parte de la misma boca de la cueva y que nos llevará por la ladera. Abajo divisamos el valle y a la izquierda hermosos bosques de haya.

Llegamos a una majada donde descansan las vacas. Desde aquí podemos disfrutar de una excelente panorámica de las cumbres de la Sierra de Peña Labra. Pasamos la majada y tomamos una pista que nos introduce enseguida en un bosque de roble por el que descendemos hasta encontrarnos con el camino por que hicimos la ascensión.


Distancia aproximada: 10 Km. (ida y vuelta). Desnivel: 400 m. Duración: 4-5 horas. Época: todo el año. En invierno y al comienzo de la primavera la nieve y el agua pueden dificultar el acceso.


Los lugares de nacimiento de los ríos suelen ser objeto de modernas peregrinaciones. Al natural deseo de conocer el origen de las aguas que sacian nuestra sed y la de nuestros campos y bañan nuestros pueblos y ciudades, se une el hecho de que los ríos nacen casi siempre allí donde la naturaleza se muestra más generosa, en entornos montañosos y espacios naturales de gran valor y belleza.


No podía suceder de otra forma con el nacimiento del Pisuerga, que a los citados encantos une el misterioso atractivo que otorga el surgir de una profunda cueva. En su origen, un humilde Pisuerga recoge las aguas navales de las montañas que rodean el idílico valle de Redondo, perteneciente al municipio de la Pernía. Valles de vocación ganadera y zona de tránsito hacia la vecina Cantabria, el origen de su población se remonta a las colonizaciones efectuadas por los primeros reyes leoneses en el inicio de la reconquista, allá en los albores de los siglos IX y X.



Tradicionalmente, Fuente del Cobre ha sido considerada como lugar de nacimiento del río Pisuerga. Sin embargo su verdadero origen está unos kilómetros más arriba, en las laderas del Valdecebollas (2.139 m.).

Las aguas recogidas por varios arroyos y pequeñas lagunas, se filtran por una sima en el sumidero del Sel de la Fuente, para surgir dos kilómetros más adelante por la boca de la cueva.
Esta ha sido explorada por varios equipos de espeleólogos. Para los interesados en el tema, Gonzalo Alcalde Crespo ha realizado una excelente monografía.


http://rutasgps.dip-palencia.es/r03/index.htm



LEYENDAS DE PALENCIA


La única ciudad española con un campo de golf en su casco urbano reúne una buena colección de misterios y leyendas en torno a sus edificios sacros y ofrece en el restaurante La Encina la mejor tortilla de patatas del mundo.

Misterios eclesiásticos y leyendas de Palencia
Uno recorre la Calle Mayor –el hilo conductor de Palencia–, la concluye en el parque El Salón, camina unos metros hacia la derecha, cruza el centenario Puente de Hierro sobre el río Carrión, camina otro poquito y se encuentra con la Isla Dosaguas y, sobre ella, un campo de golf . Nueve hoyos municipales a cinco minutos de la calle principal de la ciudad.

Es un buen comienzo para recorrer la Palencia más atípica, que estos días de mayo se decora con carteles de "Hay caracoles" en todos los bares. Es el alimento con el que se despide la primavera. Los mejores puede que sean los de Casa Cantabria (c/ Pedro Fernández del Pulgar), pero incluso en La Encina (c/ Casañé) la cocinera Cirina les hace un hueco en la barra junto a la mejor tortilla de patatas de España. O al menos así la ha considerado en tres ocasiones el jurado del Concurso Nacional de San Sebastián. El tapeo se completa con la morcilla de Fuenteandrino, un pueblo palentino de un habitante que es, claro, el que hace las morcillas. La sirven en Lucio y la venden en Peña (Plaza Mayor), una tienda de delicatessen.

Las esculturas urbanas son otra fuente de sorpresas. Por encima de todas (y de la ciudad) está el Cristo del Otero , de Victorio Macho. A sus pies existe un museo dedicado a este escultor palentino que ha sido reabierto en marzo tras un lavado de cara de todo el barrio: el Cerro del Otero. El artista tiene otra curiosa obra en la ciudad: El campesino (avenida Simón Nieto), una figura de 10 metros de altura pensada para ser situada en el Alto del León, en la sierra de Guadarrama, mirando a los campos de Castilla y que fue concluida por el palentino Luis Alonso, escultor de muchas de las obras modernas repartidas por la ciudad.

En Palencia son tan aficionados a las esculturas como a los paseos, lo que resumen las figuras gigantes de El Paseo, junto al puente Nicolás Castellanos, que representan a dos niños y sus padres. Por terminar con las esculturas, mencionemos tres de la Catedral : el Cristo de las Claras (del que se decía que le crecían el pelo y las uñas por su realismo y patetismo), la gárgola con la figura de un fotógrafo en el exterior (esculpida en una restauración a principios del XX) y la criada con coleta tras el altar mayor (dicen que tocarla da buena suerte).

En la Catedral se exhibe un borrón de colores sobre una tabla. Es un truco óptico que permite ver un retrato de Carlos V asomándose a un agujero en la madera. El juego, propio del siglo XVII, tiene hasta nombre: anamorfosis. Otra rareza es el mosaico de tema marinero en el Museo de Palencia, en la Plaza del Cordón. Se llama Océano y las nereidas y fue encontrado en la Villa Possídica de Dueñas, una de las villas romanas singularmente bien conservadas en la provincia junto con La Olmeda.

Por terminar con los temas religiosos, la iglesia de San Francisco cuenta con un túnel que la comunica con la Residencia de los jesuitas. La misma iglesia que se llena los domingos, a las 13 horas, para escuchar la homilía del padre Torres, amigo de Benedicto XVI y siempre dispuesto a dar un sermón llamativo.

En los alrededores de la plaza principal hay también dos de las tiendas más modernas e interesantes de la ciudad. La boutique Malizzia (Calle Mayor), en los bajos del palacio de Villandrando (la auténtica fachada de Palencia, obra cumbre del arquitecto Jerónimo Arroyo), une marcas poco conocidas y apreciadas y su situación en un edificio histórico. Por su parte, Adolfo Domínguez inauguró personalmente su tienda de la calle José Zorrilla , la más grande de Castilla y León y una de las más espectaculares de España, con una decoración de estilo industrial, con cemento y tubos a la vista. exterior (esculpida en una restauración a principios del XX) y la criada con coleta tras el altar mayor (dicen que tocarla da buena suerte).

En la Catedral se exhibe un borrón de colores sobre una tabla. Es un truco óptico que permite ver un retrato de Carlos V asomándose a un agujero en la madera. El juego, propio del siglo XVII, tiene hasta nombre: anamorfosis. Otra rareza es el mosaico de tema marinero en el Museo de Palencia, en la Plaza del Cordón. Se llama Océano y las nereidas y fue encontrado en la Villa Possídica de Dueñas, una de las villas romanas singularmente bien conservadas en la provincia junto con La Olmeda.

Por terminar con los temas religiosos, la iglesia de San Francisco cuenta con un túnel que la comunica con la Residencia de los jesuitas. La misma iglesia que se llena los domingos, a las 13 horas, para escuchar la homilía del padre Torres, amigo de Benedicto XVI y siempre dispuesto a dar un sermón llamativo.

En los alrededores de la plaza principal hay también dos de las tiendas más modernas e interesantes de la ciudad. La boutique Malizzia (Calle Mayor), en los bajos del palacio de Villandrando (la auténtica fachada de Palencia, obra cumbre del arquitecto Jerónimo Arroyo), une marcas poco conocidas y apreciadas y su situación en un edificio histórico. Por su parte, Adolfo Domínguez inauguró personalmente su tienda de la calle José Zorrilla , la más grande de Castilla y León y una de las más espectaculares de España, con una decoración de estilo industrial, con cemento y tubos a la vista.